La Secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Carme Artigas, ha destacado que «en un año, el mundo ha cambiado muchísimo».

«La percepción de que la IA es algo de presente y no de futuro y que se ha democratizado para siempre y que todo el mundo empieza a ver sus oportunidades y también se empieza a ser consciente de sus riesgos, es algo que no podíamos habernos imaginado hace un año», ha señalado Artigas.

En este sentido, la Secretaria de Estado ha asegurado que «la inteligencia artificial está en todos lados ya», aunque lamenta que «estamos hablando de tecnología, pero siempre desde una parte de vista pesimista». Sin embargo, defiende que «si algo se ha demostrado en los últimos años es que se han desmentido muchos mitos. La IA no elimina empleos, sino que encima hay cuatro veces más demanda que oferta».

Artigas ha puesto el énfasis en «los valor y los principios éticos de un sociedad que deben traducirse en límites a la tecnología«. «Ahora, todo el mundo ha descubierto que a la tecnología y a la IA hay que ponerle limites, incluso la industria se ha asustado de las propias implicaciones negativas de un desarrollo tecnológico sin cortapisas que puede producir unos daños a futuro que pueden ser irreversibles», señala.

Ante esta situación, la Secretaria de Estado da la bienvenida al resto del mundo al «club de las soluciones» donde estaba Europa «desde hace tres años» y «donde nos hemos sentido muy solos».

En este aspecto, Artigas ha criticado los comentarios de «algunas latitudes» que «nos miran por encima del hombro y dicen que ya vendrán los europeos a regular que nosotros adelantaremos más rápido porque crearemos en un entorno sin regulación«. «Ahora nos damos cuenta que esta tercera vía, que no era la americana ni la china, y que apuesta por valores europeos, es la única vía con la que podemos aprovechar las ventajas de la tecnología conservando los valores y principios», defiende.