Suzuki, Subaru, Daihatsu, Toyota y Mazda han cerrado un acuerdo para el desarrollo conjunto de las especificaciones técnicas de los dispositivos de comunicaciones de los vehículos de nueva generación.

El grupo de los cinco fabricantes asiáticos de coches trabajarán juntos además para promover el uso común de sistemas de comunicaciones, utilizando los servicios conectados para vincular los coches y la sociedad con el objetivo de crear nuevos servicios de valor añadido, estandarizando los sistemas para prestar servicios conectados más seguros y prácticos.

Dentro del ámbito de la denominada tecnología CASE, se está avanzando rápidamente en el campo de los servicios conectados, en relación con los aspectos tecnológicos en el campo de los servicios conectados, en relación con los aspectos tecnológicos y comerciales de las comunicaciones y los datos, incluidos los servicios de datos, IoT, datos masivos e IA.

Los distintos fabricantes de automóviles están desarrollando por su cuenta dispositivos de comunicaciones para vehículos, incluso para casos en los que se trata de los mismos servicios conectados (como el control remoto de funciones), cada compañía adopta un enfoque diferente, desplegando recursos propios para cada desarrollo.

Ante esto, los cinco se han unido para prestar unos servicios conectados más seguros y prácticos a los clientes lo antes posible enmarcando el desarrollo de dispositivos de comunicaciones, que son elementos clave de los coches conectados, en un entorno colaborativo, situando el desarrollo de aplicaciones y servicios en el ámbito interno y para conseguir así una mayor eficiencia.

Gracias a esto se podrán prestar unos servicios conectados “más prácticos a los clientes” y se reduce la carga de desarrollo de cada una de las compañías participantes

De este modo, Suzuki, Subaru, Daihatsu y Mazda incorporan sus propias innovaciones en las tecnologías básicas de comunicaciones para vehículos desarrollados por Toyota, creando sistemas para automóviles conectados de nueva generación con especificaciones comunes de conexión de los vehículos a las redes.

Gracias a esto se podrán prestar unos servicios conectados “más prácticos a los clientes” y se reduce la carga de desarrollo de cada una de las compañías participantes, simplificando el funcionamiento del sistema y las actualizaciones que incluyan nuevas funciones adicionales, logrando así una optimización de recursos.

Los cinco fabricantes han asegurado en un comunicado conjunto que están abiertos a plantearse la colaboración con otros socios que comparten su filosofía en cuanto al desarrollo conjunto acordado hasta el momento.